La idea del coworking, que hoy se asocia con modernos espacios compartidos de trabajo, ha evolucionado significativamente desde sus primeras apariciones. Este concepto, enfocado en crear ambientes colaborativos para profesionales independientes y pequeñas empresas, surge en respuesta a cambios en la dinámica laboral y la expansión de la economía digital. La historia del coworking es un recorrido interesante que nos muestra cómo los cambios culturales y tecnológicos han transformado el lugar de trabajo.
Primeros Conceptos de Espacio Compartido
Aunque el término «coworking» es relativamente reciente, la idea de un espacio de trabajo compartido se remonta a las comunidades de artistas y académicos de siglos pasados. Por ejemplo, en el Renacimiento, las escuelas y talleres de arte donde los pintores y escultores compartían espacio e ideas podrían considerarse como los antecesores del coworking. Más adelante, en la década de 1960, se desarrollaron en Europa y Estados Unidos oficinas comunitarias y espacios de aprendizaje colaborativo en algunas universidades y centros de investigación.
El Nacimiento del Coworking Moderno
El término «coworking» tal como lo conocemos hoy se utiliza por primera vez en 1999, cuando Bernie DeKoven, un diseñador de juegos estadounidense, lo emplea para describir un método de trabajo colaborativo. Sin embargo, el primer espacio físico de coworking fue fundado por Brad Neuberg en 2005 en San Francisco. Neuberg buscaba crear un espacio donde los freelancers y emprendedores pudieran escapar de la soledad del trabajo desde casa y, al mismo tiempo, evitar la rigidez de una oficina convencional. Su iniciativa, llamada «San Francisco Coworking Space«, ofrecía una combinación de espacio de trabajo compartido, tecnología e infraestructura, y comenzó con un grupo reducido de personas.
La Expansión del Coworking Global
A medida que el internet facilitaba el trabajo remoto y la conectividad digital, el concepto de coworking comenzó a ganar popularidad rápidamente. Para 2010, ya existían más de 600 espacios de coworking en el mundo, y este número se disparó en la siguiente década. Las grandes ciudades como Nueva York, Londres y Berlín se convirtieron en centros importantes para el coworking, y empresas como WeWork, Impact Hub y Regus capitalizaron este mercado, ofreciendo no solo un lugar de trabajo, sino una comunidad de colaboración.
La evolución del coworking también permitió una mayor flexibilidad laboral, lo cual coincidió con la creciente demanda de los «nómadas digitales» y de pequeñas empresas en expansión. Con ello, los espacios de coworking comenzaron a diversificarse, ofreciendo desde áreas de trabajo básicas hasta oficinas de lujo con servicios premium, adaptándose a las necesidades de distintos profesionales y equipos.
Coworking en la Actualidad y Futuro
Hoy en día, el coworking es un fenómeno global con millones de personas que lo eligen como su espacio de trabajo. Además, tras la pandemia de COVID-19, muchas empresas han adoptado el coworking para implementar modelos de trabajo híbrido. Esto ha permitido a grandes compañías reducir costos y brindar flexibilidad a sus empleados.
Con la evolución de la tecnología, se espera que el coworking continúe transformándose, adoptando más opciones de realidad virtual y otras herramientas digitales. El coworking parece haber llegado para quedarse, y su historia continuará adaptándose a las tendencias laborales de cada generación, fomentando la colaboración y el crecimiento de una comunidad de trabajo que sigue expandiéndose.